jueves, 18 de abril de 2019

Ósmosis

Un veinte de abril de madrugada  tu corazón dejó de latir,exalaste tu último aliento y la vida se te fue.
Han pasado siete años que según como los mire, me parecen nada o, me parecen todo.
Quebrada por el dolor, por la ausencia y el vacío, frágil y rota emprendí el camino de mi duelo.
Me sentí sola, incomprendida. Escuché palabras absurdas, consejos necios de quienes nada sabían de mi dolor, de nuestra complicidad, de la comunión que existía entre ambos. Lloré a gritos en la soledad de mi casa grande donde estabas presente en cada rincón. Viaje buscando consuelo.
Con el pasar del tiempo he logrado la ósmosis de tu recuerdo en mi vida. Estas en mí.