El estío con
sus días soleados
y sus noches
cálidas me envuelven.
Los crepúsculos dorados
llenan mis atardeceres.
Sola en medio
del silencio te
siento y te vivo. Nadie con
palabras huecas ajenas
a comprender lo
que no conocen
perturba la belleza
de nuestro amor
vivido. Me amaste y
te amé hasta
hacernos uno. Ahora
que te has
ido lo grito
y lo proclamo.
Eras el eje
de mi vida,
mi amigo, mi cómplice, mi
amante. Alguien me ha
dicho que he
tenido el privilegio
de vivir con
quién me amo
con fuerza y
con pasión hasta
su último suspiro y eso hoy
en medio de
mis lágrimas me
hace sentir que
aunque te haya
perdido he vivido
algo único y precioso;
lo más hermoso
de una vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario