Alguien me contó que todas las mañanas temprano iba a un parque a gritar su desesperación. Otra que lloró todos los días durante dos años. Los más dicen que el tiempo irá calmando la herida. Que el luto hay que pasarlo. ¿Qué es lo que cura el tiempo? ¿Qué es lo que hay que pasar?
¡Qué falacia! Será quizás que el ser humano se adapta a mal vivir con el dolor. El cojo sin su pierna, el ciego sin sus ojos hasta el tetrapléjico sin su cuerpo. Es cuestión de escoger entre mal vivir o no vivir. Es cuestión de darse respuestas más o menos variopintas para soportar lo insoportable. Tal vez sea el instinto de supervivencia, como animales que somos el que nos haga seguir en una vida sin sentido. Quizás sea la belleza pura de la naturaleza, una flor, un árbol, los celajes del atardecer, el mar, las verdes colinas los que nos hagan creer que aun podemos volver a vivir. No lo sé, tal vez.
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